Placebo

Paso por delante de esa escuela, Ahí estudiaba yo hace tres años, Con la cabeza hecha mierda llena de autoengaño, Con un montón de deudas y un sabor extraño. Como de estar perdido en Barna, Jodido por el ruido y por estar contigo. Hoy curro menos, tengo más ganas, Hago más música que nunca, me siento vivo. Todo lo que digo pa tirar pa alante, Es color óxido de hierro. Siempre sobrevivo a mis desplantes, A las voces de odio de mis dos perros. El de arriba y el de abajo, el jefe y el esclavo, Se llevan a matar y son hermanos. No sé los días que gasté pa ser amado, Si no te gusta lo que ves, sal del lavabo. Preguntándome en qué código se escriben nuestros sueños, Es cuando me creo sin dios ni dueño. Inercia a salir del rebaño desde pequeño, A creerme superior por mis diseños. Como si dijera que la tengo controlada, Y si la pinta es muy difícil que me vaya. ¿Cómo decirte que tengo el demonio a raya? Si lo destrozo todo si no estoy en una playa. No hay para tanto, me cuesta discernir, En el rol de víctima me olvidé de mí. Evolucionando, conformarse es morir, Me subestimo para no tenerme que lucir. Y cuando digo que por dentro hay Chernóbil, Por fuera es otra cara del carnaval de Brasil. En esos días donde no te cojo el móvil, Pa no tener ni que mover un dedo por ti. Si te dijera que no me lo tomo como un niño, Que me quedo aunque no tenga el dominio. Entonces me veras bajando un peldaño Y durmiendo a ras de suelo donde el autoengaño. Es cuando te digo que no tengo prisa, Que ya llegará lo de quemar la Visa. Lo de pisar Latinoamérica de gira, Que puedo ser feliz viviendo una mentira. Con la mentira, autodeleitarse, Cegarse y no querer ver la realidad, subversiva, Los mismos fallos, materializar. Esperándote Con la puerta entreabierta Y las heridas A medio curar. Que me querías, Decías, y yo te creía. Las cicatrices, La vida...