Excelso

Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad Quieres que te escuchen las naciones No le hablas a la tuya Miles de seguidores Gritandote aleluya Que tu letra sea el boom Y siempre se distribuya Pero sin Dios en el cora, tu solo estas haciendo bulla... Discúlpa pero lo encuentro inoportuno Viajar por todo el mundo dando el salmo 21 Has orado por latinos, gringos, chinos sumos Y en tu patria todo mal, ya no hay ni para el desayu No descuides de tu tierra mejor siembra alli primero Que al momento de emigrar Dios ira de delantero Te lo digo con certeza no lo digo por que quiero Pues eh visto su respaldo cuando menguo yo primero Y no quiero motivarte a que dejes de hacerlo Simplemente la soberbia puede matar tu talento Ten cuidado cómo llevas todo esto Pues las fuerzas de los hombres son nulas sin el Maestro Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad Mientras prefieras la cultura antes de soltar ataduras Solo crecerá la frustración y un camino que no perdura Te abrazas al aplauso que te entrega la tribuna Lo amas como pedro pero actúas como judas Tus barras son el pan pero la masa esta muy cruda Tu típica lirica sabe a libros de autoayuda Ya no sabes de que hablar tu cabecita esta muy dura La vida no es tan facil si no cumples lo que juras Pero tranquilo que aun es tiempo de poner a reparar Las cosas que todo este tiempo broda hicimos mal La altivez del corazón Jesucristo puede sacar Si visitas su taller para que el pueda trabajar En nuestra avaricia en la interna competencia De ser mejor que el otro sin conocer su vivencia Despojate de toda gloria limpia tu conciencia Que sin Cristo no eres tu cuando muestras exelencia Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad Todo lo que sube pana tiene que bajar No es la gran sabiduría es la ley de gravedad