La Monja Alférez (Fandango)

Era una niña arrogante Fresca como una toronja Que habrían de hacerla monja Por quitarle lo aberrante En armas, botas y uniformes Todas las noches soñaba Y en llevar bajo las bragas Eso que tienen los hombres Las novicias del convento Chismorreaban todo el día Decían que preferían Que se vaya a un regimiento Cuentan que esta monja un día Se vistió de sacerdote Confesó a todas las monjas Las tenía del cogote En las noches afloraban Sus más oscuras pasiones Para proteger sus dones Las monjitas se ocultaban "Sus pecados contaré A la madre superiora!" Y las pobres sin demora Cedían a sus chantajes Ella no oía razones Y así cuenta la leyenda Que la alférez daba rienda Suelta a sus perversiones Cuando ya no pudo más Trepando el muro escapó Y su hábito transformó En un par de pantalones Se cosió algunos galones Engañó a hombres y mujeres Y así la leyenda nació De la infame Monja Alférez Hombre que actúa de mujer Es una perversión Y mujer que cree ser hombre Es una aberración Lo que natura no da Natura no quita Acá la única verdad Es que, o eres macho o mujercita