Cómo Te Explico

Cómo te explico... que un día quiero regalarte el mundo entero pero otras veces quisiera salir corriendo porque me aprietan las cadenas que me invento, porque me asustan los finales que me cuento. Pero otro día sale el sol sobre tu pelo y son tus párpados cerrados todo el cielo. Yo te acaricio como si fueras un sueño y me acurruco en el regazo de tu pecho, tu pecho, tu pecho... No te vayas, no me dejes, no escuches cuando ya no digo nada. No me juzgues, no me sueltes, ¿es que no ves que no soy yo quien habla? No te vayas, no me dejes, no escuches cuando ya no digo nada. No me juzgues, no me sueltes, ¿es que no ves que no soy yo quien habla? No soy yo quien habla... Que esta cabeza sale disparada y rompe brújulas en las montañas, por más que intento tenerla callada ella nunca para, ella nunca para. Y yo quisiera salvarte de todo, de mí primero y todo lo que rompo; y tú cuidándome como si nada, en plena tormenta besando mi cara, mi cara, mi cara... No te vayas, no me dejes, no escuches cuando ya no digo nada. No me juzgues, no me sueltes, ¿es que no ves que no soy yo quien habla? No te vayas, no me dejes, no escuches cuando ya no digo nada. No me juzgues, no me sueltes, ¿es que no ves que no soy yo quien habla? No soy yo quien habla... Yo quisiera quedarme a vivir bajo tu piel para mirarme así, pá poder ver lo que tú ves en mí. Que yo quisiera quedarme a vivir bajo tu piel para mirarme así, pá poder ver lo que tú ves en mí.